La Selección Mexicana ha encontrado en Raúl Jiménez y Santiago Giménez una fórmula efectiva en el ataque. Bajo la dirección de Javier Aguirre, esta combinación de delanteros ha logrado consolidarse como una de las más productivas del conjunto nacional en los últimos encuentros.
Ambos atacantes, formados en América y Cruz Azul respectivamente, han compartido la delantera en seis partidos, acumulando un total de 385 minutos juntos en el terreno de juego. Durante ese tiempo, el equipo ha anotado once goles, lo que representa un promedio de un gol cada 35 minutos cuando los dos están al mismo tiempo en la cancha.
Una dupla con gol
De los once tantos conseguidos en esos 385 minutos, siete han sido anotados directamente por esta pareja: cinco por Raúl Jiménez, actual delantero del Fulham, y dos por Santiago Giménez, quien milita en el Milan. Su presencia ofensiva ha sido clave para el buen rendimiento reciente del Tricolor.
Un momento destacado ocurrió en el duelo más reciente ante República Dominicana, cuando por primera vez se combinaron directamente para una anotación. Giménez asistió a Jiménez para el segundo gol del partido, demostrando una conexión que parece fortalecerse con el tiempo.
Resultados positivos con el sello Jiménez–Giménez
Desde que Javier Aguirre apostó por esta dupla en el ataque, México ha conseguido resultados positivos: cuatro victorias ante Canadá, Panamá, Turquía y República Dominicana, un empate frente a Uzbekistán y una derrota contra Suiza. Este balance favorable refuerza la confianza del cuerpo técnico en mantener a estos dos como los referentes ofensivos del equipo.
Aunque fue Jaime Lozano quien inicialmente probó esta fórmula en la delantera, ha sido Aguirre quien la consolidó como parte de su estrategia principal. La eficiencia goleadora y la química en el campo han convertido a Jiménez y Giménez en piezas clave del proyecto actual.
Con el calendario de competiciones internacionales por delante, esta sociedad promete seguir dando frutos y convertirse en un pilar fundamental del presente y futuro del fútbol mexicano.